PARQUE NACIONAL DEL LAGO MANYARA

El Parque Nacional del Lago Manyara, ubicado en el norte de Tanzania, es una de las áreas protegidas más fascinantes del país, a abarca aproximadamente 330 km², de los cuales cerca de 200 km² están cubiertos por el lago alcalino que le da nombre. Este parque forma parte del ecosistema del Gran Valle del Rift, una de las formaciones geológicas más impresionantes del mundo, y se extiende entre la escarpada pared del valle y las vastas llanuras que lo rodean. Su paisaje es variable, combinando densos bosques subterráneos alimentados por manantiales, extensas sabanas, acantilados rocosos, aguas termales y el propio lago, cuyas dimensiones varían con las estaciones y las precipitaciones. Esta diversidad de ecosistemas permite que el parque sea un refugio para una gran cantidad de especies animales y vegetales, convirtiéndolo en un destino clave para la observación.

árboles, un comportamiento inusual en esta especie, que suele descansar en las ramas de las acacias para evitar el calor del suelo y los insectos molestos. Además, el parque es hogar de una gran población de elefantes, algunos de los cuales se encuentran entre los más grandes de África, así como de búfalos, jirafas, cebras, hipopótamos, ñus y una variedad de primates, incluyendo grandes grupos de babuinos y monos azules. La abundante vegetación y las fuentes de agua garantizan la presencia constante de herbívoros, lo que a su vez atrae a depredadores como leopardos, hienas y chacale.

El Lago Manyara en sí es un punto focal del parque, famoso por sus enormes bandadas de flamencos rosados ​​que se congregan en sus aguas alcalinas para alimentarse de algas y pequeños crustáceos. Además de los flamencos, el parque alberga más de 400 especies de aves, incluyendo pelícanos, garzas, cigüeñas, águilas pescadoras y martines pescadores, convirtiéndolo en un paraíso para los observadores de aves. La abundancia de agua y vegetación hace que el parque sea particularmente atractivo para la vida silvestre durante la estación seca, cuando los animales migran desde otras áreas en busca de agua.

MEJOR ÉPOCA PARA VISITAR

El parque se puede visitar durante todo el año y cada época te ofrecerá una experiencia única y diferente.

Si vas en busca de los grandes mamíferos la mejor temporada sin duda será durante la estación seca, que va de junio a octubre. Durante estos meses, los animales se concentran en torno a las orillas del lago, lo que facilita la observación de la fauna. Además, las temperaturas son agradables, con días soleados y noches frescas. Por el contrario el parque recibe muchos mas turistas en esta época.

Si eres amante de las aves, la época ideal para visitar el parque es durante la temporada de lluvias (de noviembre a mayo) cuando los paisajes se transforman de un color verde exuberante y la migración de aves se encuentra en pleno apogeo. Durante esta época, la experiencia de safari será mucho mas intima y solitaria, debido a la menor intensidad de turismo.

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